de tu silencio,
mientras en mi hondo andar
anudo un hilo de luz
que abotona
mi corazón.
Auguran voces de cristales
en la tarde.
Un lirismo interno
me arrebata
la dulzura del viento.
Es octubre en Formosa
y los lapachos hablan de ti.
Sobre el crujir de las hojas
he escuchado quebrarse tu nombre...
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